Con un enfoque adaptado a las necesidades individuales, la institución acompaña a las personas desempleadas a través de formación, orientación laboral y apoyo en competencias digitales, impulsando su integración en el mercado laboral.
Cáritas Salamanca ofrece un servicio de formación y empleo que busca fomentar la independencia económica de quienes participan. Desde su inicio en 1998, este programa ha evolucionado para responder a las demandas del mercado laboral y proporcionar un apoyo integral a las personas desempleadas, ayudándolas a encontrar trabajo y a mejorar sus perspectivas laborales.
Durante el último año, 1.268 personas participaron en este servicio, de las cuales 433 eran hombres y 835 mujeres. Este acompañamiento resultó en la inserción laboral de 127 personas, gracias a diversas acciones formativas y de apoyo ofrecidas por la entidad.
Un enfoque personalizado y flexible
María Élices, coordinadora del centro de empleo y formación Padre Basabe (ubicado en el Paseo de San Antonio, 14) explica que el programa se caracteriza por su atención individualizada. “Cada usuario recibe atención personalizada, adaptada a sus necesidades, experiencia previa y objetivos profesionales. Trabajamos con las personas según sus posibilidades, ofreciendo un itinerario muy específico que no es rígido, sino totalmente ajustado a cada caso”, asegura.
El proceso comienza con una primera acogida, que puede ser por iniciativa propia de la persona o por derivación de otros servicios de Cáritas u organizaciones sociales colaboradoras. En esta etapa, el equipo realiza un diagnóstico inicial para conocer el perfil, expectativas y experiencia previa de los participantes.
A partir de esta información, se les dirige hacia los recursos más adecuados. “Entre ellos, se encuentra el servicio de orientación laboral, donde los usuarios reciben apoyo para definir un plan de acción personalizado. Les ayudamos a elaborar estrategias de búsqueda de empleo, proporcionándoles recursos, formación específica y entrenamientos en competencias necesarias, como el uso de herramientas digitales”, detalla la coordinadora.
Formación ocupacional y apoyo digital
Uno de los pilares del programa son los cursos de formación ocupacional en áreas como cocina, camarera de pisos, jardinería, soldadura o carpintería metálica. Estas formaciones, de nivel medio, permiten a los participantes obtener una titulación oficial que mejora sus oportunidades laborales. Estos proyectos cuentan con el respaldo del Fondo Social Europeo, la Junta de Castilla y León, y financiadores privados como el programa “Empleo en igualdad de oportunidades” de Inditex, entre otros.
Además, el centro de empleo ofrece apoyo en competencias digitales. Muchas personas acuden para aprender a elaborar currículums, gestionar correos electrónicos o actualizar su perfil digital. “Les ayudamos a fortalecer sus competencias digitales esenciales en el mercado laboral actual”, explica Élices. También se les asesora en trámites como la renovación de la tarjeta de demanda de empleo o la solicitud de citas en servicios sociales.
El centro dispone de aulas de informática donde los usuarios pueden realizar estas gestiones con ayuda del equipo de Cáritas. “Muchas veces, las personas necesitan apoyo en tareas básicas que son clave para su integración laboral”, concluye la coordinadora.
Profesionalización del empleo doméstico
Desde 2008, Cáritas Salamanca impulsa un proyecto específico para la profesionalización de las empleadas del hogar, un sector compuesto mayoritariamente por mujeres. Este programa no solo se enfoca en formar a las trabajadoras en competencias técnicas, sino también en temas como derechos laborales, igualdad de género, prevención de riesgos laborales y sostenibilidad ambiental.
El objetivo es garantizar que las empleadas del hogar puedan ofrecer un servicio de calidad y profesionalizado, mientras se fomenta el respeto por sus derechos. “Las familias que recurren a este servicio confían en que las candidatas han sido formadas en Cáritas y garantizamos que tienen las competencias necesarias para desempeñar su trabajo con profesionalidad”, concluye la coordinadora.
Este compromiso de Cáritas Salamanca refleja su misión de acompañar a las personas en su camino hacia una vida más digna y autónoma, ofreciendo no solo herramientas para el empleo, sino tambiénesperanza y oportunidades reales de cambio.
Proyectos cofinanciados por el IRPF de la Junta de Castilla y León, el Fondo Social Europeo y fondos propios.