Satisfacción y Oportunidades de empleo

Éste es el balance del curso de ‘Atención Sociosanitaria a personas dependientes en Instituciones Sociales’, que finaliza con un 80% de alumnos/as insertadas en el mercado laboral.

Desde el 10 de mayo y hasta el 20 de septiembre, un grupo de 10 alumnos y alumnas han cursado este certificado de profesionalidad impartido por Cáritas Diocesana de Salamanca con la cofinanciación del Fondo Social Europeo en su convocatoria FSE + de Inclusión Social, Garantía Infantil y Lucha Contra la Pobreza – Programa Competencias+.

Esta formación ya es la 4ª edición de asistente sociosanitario a personas dependientes en instituciones sociales que se imparte en el Centro de Empleo y Formación Padre Basabe. Sabemos que es un perfil muy demandado en Salamanca, tanto por las residencias de mayores, como por Centros de día e incluso personas particulares asistidas en sus domicilios.  A lo largo del curso, el equipo docente del curso ha procurado transmitir la importancia de los cuidados a personas y hacer hincapié en la dimensión humana de esta tarea. Uno de los éxitos del mismo es que el alumnado ha captado este aspecto, como nos cuenta Alba Mª en su testimonio:

“Me he encontrado un grupo de profesionales que no han querido dejarse nada en el tintero, para que pudiéramos salir con la mayor formación posible, incluso mayor de la que la gente pensaría que nos corresponde.  Desde el primer día, se puso a nuestra disposición todo lo que estuvo al alcance de la organización y sus trabajadoras, ya que, tras conocer a otras personas del oficio, supe que en sus formaciones no dispusieron ni de la mitad de material físico del que hemos podido ver en Cáritas”.

Este certificado de profesionalidad es exigente, requiere esfuerzo y desarrollar o recuperar un hábito de estudio y una constancia. Por ello, desde el equipo del Centro de Empleo y Formación

Padre Basabe, queremos agradecer al alumnado el compromiso y la dedicación que han mostrado, superando diferentes dificultades. Ana Mª, por ejemplo, nos lo transmite en su testimonio: “… esto ha sido un reto cumplido; soy madre de 3 niños y para mí era casi imposible conciliar su cuidado y la formación, pero aun así ustedes me dieron la oportunidad de aprender y ahora tengo la oportunidad de trabajar. Con ello podré ofrecer una mejor calidad de vida a mi familia.”

Agradecemos a Emma y Joaquina por su buen hacer como equipo docente, porque han sabido conectar con el alumnado y enseñar siguiendo el modelo de acción social de Cáritas poniendo a sus alumnos en el centro, para que aprendieran a poner a sus asistidos en el centro de su actuación como profesionales.  Así lo refleja Isabel Mª en su testimonio:

“El ambiente en las aulas fue enriquecedor y estimulante, nos brindaron apoyo no sólo académico sino personal, las clases se transformaron en un espacio dinámico de aprendizaje, fomentando en nosotros una actitud responsable y humana hacia las personas asistidas”.

Y así lo refuerza Alba Mª con sus palabras: “Tanto Emma como Joaquina nos han transmitido la pasión que sienten por su trabajo y todos los conocimientos que están a su alcance, e incluso más”.  

Y así, entrando de lleno en los agradecimientos por los buenos resultados del curso, hemos de AGRADECER, con mayúsculas, a las residencias que han colaborado con nosotros en la realización del módulo de prácticas formativas no laborales: Asociación Familiares de Alzheimer-Residencia Boni Mediero, Colisée La Vega, Colisée Montevideo, Colisée Santa Marta, ASPACE-Casa Hogar Araluz, Ballesol, Clece Vitam San Antonio, Fundación Aliados por la Integración- MM. Veracruz, Mevefares-Sanitas y Casa de la Iglesia-Calatrava. Por su acogida, su disposición a formarles durante las prácticas y muy especialmente por las 8 oportunidades de empleo que les han brindado al finalizar su formación; son ya parte de las Empresas con Corazón de Cáritas Salamanca.

Esa formación práctica ha dejado en el alumnado una impronta muy especial; Isabel Mª nos lo comparte en su testimonio: “En cuanto a las practicas, decir que desde el primer momento el equipo me acogió con los brazos abiertos, brindándome todo el apoyo necesario para adaptarme y desarrollar mis habilidades. He aprendido a crecer, no solo como profesional, sino como persona. Creo, sin duda, que esta experiencia ha reforzado mi vocación por la Atención Sociosanitaria y me ha brindado lecciones de vida que llevaré siempre conmigo”.  

Además de la formación en el aula y en empresas, el alumnado del curso de Atención Sociosanitaria ha participado en visitas pedagógicas en las que han podido ampliar conocimientos y abrir nuevos horizontes para la formación complementaria. Agradecemos al Centro de referencia para el Alzheimer y a las Asociaciones Insolamis, Síndrome de Down y Ariadna por haber compartido con nosotros su experiencia y sabiduría.

También queremos agradecer al área de Formación del Servicio Público de Empleo de la Junta de Castilla y León, en especial a Raquel y Belén, por su cercanía, disposición, asesoramiento y por haber realizado la supervisión del curso buscando favorecer el interés por formarse de nuestro alumnado como si fuera el suyo propio.

Esta aventura que acaba es el resultado de un esfuerzo colectivo en el que el servicio a las personas que hemos acompañado se ha visto amplificado por la complicidad de otros/as compañeros/as que nos han apoyado. Gracias también a todos/as ellos/as.

Cerramos esta experiencia agradeciendo al alumnado la confianza depositada en Cáritas Salamanca y la oportunidad de acompañarles en sus historias de vida. Alba Mª se despide así en su testimonio: “No me queda más que dar las gracias a María, por haber estado pendiente de todos los detalles desde el día 1 y, aun habiendo acabado el curso, ofrecernos todos los servicios de los que dispone Cáritas para lo que pudiéramos necesitar”.