El equipo expuso la importancia del proyecto para garantizar la atención integral de personas en exclusión con trastorno mental.
El pasado miércoles 23 de noviembre, nuestro centro de día Ranquines para personas con trastorno mental recibió una invitación muy especial; participar en los ‘Miércoles Solidarios’, una actividad del Arciprestazgo de Miranda que busca promover la cultura del encuentro (era el momento perfecto, ya que apenas ha pasado medio mes desde que pusiera en marcha su jornada de visibilización sobre el cuidado de la salud mental).
Varios integrantes del equipo de Ranquines se desplazaron hasta la Casa de Cultura del municipio en Burgos, para exponer la experiencia de creación y consolidación de Ranquines como apuesta diocesana por el cuidado de la salud mental de personas en situación de exclusión. Una presentación que arrancó obsequiando a todos los presentes con un pequeño trozo de cuerda muy especial en el marco del Proyecto Ranquines, ya que sus nudos simbolizan la fortaleza de las dimensiones de la persona.
Gema Romero y Laura Ciudad, psicólogas del centro, expusieron los orígenes, funcionamiento y metodología del proyecto, centrado en “personas que padecen trastornos del ámbito de la psicosis, esquizofrenias, trastornos del ámbito del estado de ánimo…, y que prácticamente están en la calle”.
Ambas arrojaron datos preocupantes en términos de salud mental, sobre todo a raíz del estallido de la pandemia del coronavirus. Aun así, alentaron la creación de iniciativas semejantes en otras ciudades. En sus palabras: “es una iniciativa que garantiza la atención integral y continuada a las necesidades de las personas con trastorno mental con más dificultades de integración social». Un proyecto con tres objetivos básicos: “promover la autonomía, favorecer la inclusión y potenciar las capacidades de las personas”.