Los salones de la parroquia de San Isidro acogen esta acción que comenzó ayer y de la que se beneficiarán un total de trece personas, la mayoría migrantes y demandantes del primer empleo o con escasa experiencia laboral.
La formación será impartida por una educadora y varios voluntarios profesionales del sector. El pre-taller pretende crear una estructura estable de las primeras fases de formación, con el fin de favorecer más los hábitos de cara al desarrollo de la empleabilidad.
Desde Cáritas se apuesta por una formación integral que contemple aspectos técnicos muy básicos relacionados con el aprendizaje del oficio y por otro lado habilidades de carácter más personal, mediante un proceso de aprendizaje gradual, basado en pilares como el conocimiento, la motivación, la información, el acompañamiento y la orientación laboral.