Las personas que se encuentran en la 1ª fase del Centro de Atención a las Drogodependencias visitaron el pasado miércoles el Valle de Batuecas y La Alberca, y uno de sus participantes nos ha querido contar en primera persona esta vivencia a través de la siguiente crónica:
“Comenzamos nuestra salida cultural con mucha ilusión y ganas de pasarlo bien. Llegamos al Valle de las Batuecas de escarpadas laderas y abundante vegetación, está situado al sur de la provincia de Salamanca y debe su nombre al río que lo atraviesa.
En la primera parte de la ruta visitamos el Monasterio del Desierto de San José. Se trata de uno de los principales conjuntos monásticos de Castilla y León, Allí nos esperaba el Padre Francisco el prior del monasterio, quien nos explicó el sentido del Convento del Desierto carmelitano, construido en esta zona inhabitada como lugar de vida retirada y eremítica junto a numerosas ermitas ubicadas tanto dentro como fuera del recinto conventual, diseminadas en su mayoría por los riscos circundantes y cuyas ruinas se conservan en la actualidad. El monasterio responde a la norma carmelitana de sencillez y austeridad.
A continuación, nos acercamos al Mirador de San José, desde el que pudimos observar una excelente. Luego fuimos a ver la ermita del alcornoque donde nos explicaron la historia del Padre Cadete el cual vivió en un alcornoque que estaba en ese lugar y donde murió. Sus restos están en el monasterio.
Continuamos la ruta para ir al Canchal de las Cabras Pintás (o Pintadas), donde pudimos ver un excelente yacimiento de pinturas rupestres al aire libre.
Bajamos a unas bonitas pozas del rio Batuecas donde nos dimos un baño y comimos unos generosos bocadillos. Se nos pasó el tiempo sin darnos cuenta y el ambiente que se respiraba en el grupo era el de no irnos de ese lugar.
En la segunda parte de la jornada visitamos La Alberca. Su plaza mayor, se encuentra situada en el centro del pueblo y es el corazón de la vida de La Alberca. A su alrededor se sitúan los edificios tradicionales y más importantes, como el Ayuntamiento y la Casa Ducal con grandes balconadas, convertidos en restaurantes donde tomamos un cafetito.
Es el lugar más fotografiado de La Alberca por sus hermosos balcones y soportales con columnas de granito que la rodean. En el centro destacan una fuente y un crucero del siglo XVIII que tiene grabados los símbolos de la Pasión de Cristo.
A continuación, visitamos su parroquia Nuestra Señora de la Asunción que se construyó en el siglo XVIII sobre los restos de una iglesia anterior de la que sólo se conserva su gran torre. Tiene planta de cruz y es de estilo neoclásico con algún detalle barroco.
Recorrimos sus estrechas calles empedradas se levantan edificios de dos y tres pisos que han servido durante siglos de residencia a los albercanos. Estas casas tradicionales servían como residencia, y, además, en la parte baja solían tener los albercanos el ganado, bodegas o almacenes de diferentes productos. Lo más característico de estos edificios cuya estructura es de piedra es el exterior con través de madera típica en la arquitectura serrana.
Gracias a Cáritas, representados en las personas de Fran y José M.ª, y a los voluntarios por su servicio y preparación. Un día diferente en nuestro proceso de cambio de estilo de vida donde la fuerza del Grupo ha sido muy importante el silencio del lugar, la alegría y las risas han estado muy presentes”.
El Centro de Día de Atención Integral a las Drogodependencias es un proyecto financiado por el IRPF de la Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento y la Diputación de Salamanca, junto con fondos propios.
Colabora
Cáritas Diocesana de Salamanca
Grupo Undanet