Yohanes Baskoro, coordinador de Caritas Indonesia, admite que “llevará mucho tiempo recuperarse de este desastre”.
Cáritas Indonesia (conocida localmente como KARINA) está haciendo, desde las horas posteriores al grave terremoto y posterior tsunami que asoló el pasado viernes las costas orientales de las islas Célebes (Sulawesi), una identificación de las necesidades más urgentes, en coordinación con los organismos del Gobierno y otras agencias humanitarias no gubernamentales.
Respuesta a necesidades básicas
De acuerdo con los datos facilitados por Karina a la red internacional de Cáritas, hay una gran necesidad de alimentos, agua, refugio temporal y medicinas, que son las prioridades en las que la red Cáritas en Indonesia está centrando su respuesta en esta primera fase de la emergencia y en la que, con toda probabilidad, tendrá que seguir poniendo el foco en los próximos meses.
En palabras de Yohanes Baskoro, coordinador de programas de Cáritas Indonesia, “llevará mucho tiempo recuperarse de este desastre”. “Es probable que las víctimas sean más de 1.000 personas, porque hay muchos lugares que todavía no han sido visitados, así que realmente no podemos saber lo qué ha pasado. Esta catástrofe ha provocado una gran cantidad de muertes y los retos prácticos para ayudar a los sobrevivientes son enormes”, añade.
Equipo de Cáritas se desplazan a Palu
Un equipo de evaluación de la diócesis de Makassar, ubicada al sur de Sulawesi, está viajando por tierra a Palu, al norte de la isla, donde si sitúa la “zona cero” de la catástrofe. La distancia es de 500 km y normalmente dura una 9 horas, pero que las vías terrestres están dañados y el acceso a la zona siniestrada es muy complicada. Otro equipo está viajando desde Yakarta, pero los aeropuertos están también muy saturados con la llegada de personal humanitario.
Además de colaborar en la respuesta a la emergencia, estos equipos van a evaluar en el terreno las prioridades de los damnificados, con objeto de diseñar una respuesta orientada a cubrir las necesidades más urgentes y las primeras medidas de reconstrucción.
Llamamiento de ayuda
Se estima que en los próximos días Cáritas Indonesia estará ya en condiciones de emitir un llamamiento de ayuda a toda la red Cáritas para canalizar el apoyo económico a los distintos capítulos de la emergencia, la post-emergencia y la reconstrucción.
Cáritas Española está a la espera de conocer los detalles de ese llamamiento para movilizar los fondos de solidaridad con Karina e identificar el destino de los mismos por zonas, necesidades y número de damnificados.
KARINA está siguiendo el procedimiento de respuesta a emergencias de la red Cáritas para apoyar la respuesta que lidera una comisión integrada por la diócesis de Manado (al norte de Célebes) y la Cáritas Archidiocesana de Makassar. Ambas serán responsables de la respuesta a esta emergencia, bajo la coordinación de KARINA.
La diócesis de Makassar habilitará algunos de sus edificios para acoger a los desplazados que llegarán desde Palu en los próximos días. Mientras que en Manado se están habilitando los patios de las iglesias como refugios temporales. El director diocesano ha pedido a las parroquias donaciones para afrontar la respuesta inicial, al tiempo que grupos de jóvenes voluntarios se han movilizado para ayudar a los damnificados.
Más de 1.200 muertos y 48.000 desplazados
Según los datos actualizados por la Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Indonesia (BNPB), el balance de muertos por el seísmo y el posterior tsunami es de al menos 1.234 muertos, además de 799 heridos graves ingresados en distintos centros hospitalarios.
Los servicios de electricidad, agua y gas siguen interrumpidos. Miles de personas carecen de alimentos y agua, mientras los centros de desplazados no dejan de recibir damnificados en busca de ayuda de primera necesidad. En un recuento inicial, se han contabilizado ya 48.000 personas acogidas en refugios temporales.
El único acceso para llegar a la ciudad de Palu es a través de Mamuju Pasang Kayu y Donggala. Esta ruta está ahora muy concurrida, ya que es el único camino para hacer llegar la ayuda a la zona afectada. Las condiciones de la carretera, las limitaciones en las comunicaciones y la falta de estaciones de servicio son auténticos retos para el equipo de Cáritas Makassar que intenta llegar a la zona.
Hasta el momento, las necesidades más urgentes que se han identificado son agua potable, alimentos, medicinas y personal médico, y alimentos infantiles, así como combustible, carpas, tanques de agua, equipo de iluminación, generadores, bolsas, mantas y cubiertas.