El sacerdote diocesano Miguel Ángel García Sánchez falleció anoche en Salamanca a los 62 años, tras una larga enfermedad. Toda la diócesis llora su pérdida.
Médico y teólogo, fueron 32 años lo que dedicó a su labor apostólica, tras su formación con los Padres Paúles de Santa Marta de Tormes.
Desde Cáritas queremos recordar su importante trabajo en el recurso de atención a las drogodependencias, servicio que él puso en marcha y coordinó en sus inicios.
Tras una larga trayectoria al servicio de la diócesis, los últimos años estuvo vinculado a la parroquia de Sancti Spiritus y en 2014 fue nombrado delegado diocesano de Pastoral de la Salud. También, ejerció otros cargos de relevancia pastoral, como el de coordinador de los miembros del Servicio de asistencia religiosa católica (SARC) en los centros hospitalarios públicos, desde 2016 a 2019, y miembro del Consejo de Pastoral diocesano.
Hoy recordamos sus palabras siempre de ánimo, un ejemplo de servicio.
Descansa en paz, Miguel Ángel.