En el espacio verde de abril, nuestra voluntaria Esther Sánchez nos habla de la importancia de la economía solidaria. ¿En qué consiste? ¿Cómo la aplica Cáritas? Y sobre todo ¿Cómo podemos contribuir a ella? Además, Esther nos explica qué logramos marcando la doble casilla solidaria en nuestra declaración de la renta. Una opción que no nos cuesta nada, pero sirve para mucho:
“Cáritas apuesta por la ECONOMÍA SOLIDARIA: una economía que ESCUCHA y atiende todas las necesidades, que CUIDA de las personas y del medio ambiente; una economía que SUMA, porque persigue el bien común y la cooperación; que CAMBIA, porque que es transformadora, tanto en lo personal como en lo colectivo. Este modelo no sería posible sin la contribución de todos.
El modelo de economía solidaria de Cáritas está al servicio de todas las personas, a las que llega a través de programas de empleo inclusivo, iniciativas de economía social, propuestas de comercio justo, fomento del consumo responsable y compromiso con las finanzas éticas, con alternativas que demuestran que otro modelo económico es posible.
Y para lograrlo, Cáritas nos necesita a todos. A nivel individual, podemos apoyar la transformación social con pequeños gestos como elegir empresas de economía social, consumir productos de comercio justo, contratar en tu hogar o tu empresa a personas con condiciones laborales dignas, gestionar nuestros ahorros a través de la banca ética, cuidar el medio ambiente o practicar el consumo responsable, Informándonos de las repercusiones sociales y medioambientales de nuestras decisiones cotidianas.
Además, podemos colaborar como voluntarios en los proyectos de economía solidaria de Cáritas, contribuir económicamente con sus proyectos o compartir mensajes en favor de la economía solidaria y la organización.
Doble casilla: más ayuda
En estas fechas, con la Declaración de la Renta, se nos presenta otra gran oportunidad para contribuir al modelo de economía solidaria. Cáritas Española recibió el año pasado casi 30 millones de euros de la casilla solidaria de la Renta. Marcar las dos “X”, la de la Iglesia y la de Fines Sociales, no supone pagar más, ni que te devuelvan menos. Sin embargo, todavía hay casi una de cada dos personas que no la marcan.
El 53% de las personas contribuyentes marcaron la casilla solidaria de la Renta, superando los 12 millones de personas. Sin embargo, todavía hay un 47% que no lo hacen, bien porque marcan solamente la casilla de la Iglesia católica o porque no lo hacen en ninguna. Dejar en blanco estas casillas de la asignación tributaria supone que una parte importante de la recaudación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) pase cada año directamente a las arcas del Estado, en lugar de destinarse a fines sociales o al sostenimiento de la Iglesia.
Desde 2017, los fondos asignados por los contribuyentes a través de la casilla de Actividades de Interés Social, conocida como la ‘X Solidaria’, se distribuyen a las organizaciones del Tercer Sector a través de una convocatoria pública de subvenciones, en un sistema de doble tramo. Las ONG destinan íntegramente estas cantidades a proyectos concretos, no a sus estructuras.
Los fondos obtenidos por Caritas fueron destinados a distintos programas relacionados con el acompañamiento de personas y familias en situación de vulnerabilidad, proyectos de acogida y asistencia, familia, infancia y juventud, mayores, personas en situación de sin hogar y vivienda.”