Espacio Verde: La navidad y los regalos que el planeta no puede pagar

En el espacio verde de noviembre, nuestra voluntaria Carmen Sanchis nos invita a replantearnos nuestras celebraciones navideñas desde una mirada más humana y solidaria. Recordando el impacto que nuestro consumismo desenfrenado tiene sobre la casa común, y ofreciendo valiosos consejos para sustituirlo por otro más responsable y fraterno.  

“La navidad es una época tradicionalmente asociada con la alegría, la unión familiar y los regalos. Pero con el tiempo, se ha ido transformado en una temporada de consumismo desmedido. Durante estas próximas semanas, las calles y centros comerciales se llenarán de personas buscando algo “especial, para alguien especial, en una fecha especial”, mientras las plataformas de comercio electrónico lanzarán ofertas irresistibles, olvidándonos de que, detrás de la magia navideña, se esconde el temido impacto ambiental.

La fiebre de las compras navideñas deja una huella imborrable en el planeta: montañas de desechos, recursos naturales sobreexplotados, emisiones de carbono disparadas por la producción y transporte de bienes. La navidad tiene coste ambiental. Las semanas previas son el pico del consumo global. Millones de personas lo compran todo: ropa, juguetes, equipos electrónicos y artículos decorativos. Olvidan que ello tiene un precio. Recordemos que muchos de estos productos están vinculados con industrias altamente contaminantes, el fast fashion o los dispositivos electrónicos.

Las compras excesivas durante la navidad no solo afectan al medio ambiente, sino también a la economía personal. Muchas familias gastan más de lo que pueden permitirse, acumulando deudas para llenar el árbol de regalos. Este ciclo de gasto impulsado por la publicidad y las tradiciones sociales no sólo es, a día de hoy, insostenible para las personas, sino también para la casa común. La ironía es que, mientras nos enfocamos en la compra de cosas materiales, olvidamos el verdadero propósito de la navidad: compartir momentos significativos con nuestros seres queridos.

¿Qué podemos hacer? Celebrar de manera consciente y sostenible. Existen formas de disfrutar la navidad sin caer en excesos. Aquí proponemos algunas ideas para obsequiar de manera más respetuosa con nuestra casa común. Por ejemplo, regalar experiencias que dejen recuerdos duraderos en tus seres queridos: las entradas para un concierto, una cena fantástica o un curso de interés. Estos regalos tienen un impacto ambiental mínimo.

Otra opción es ayudar a la economía de tu ciudad, haciendo compras cerca de casa para apoyar a pequeños negocios que ofrecen productos artesanales, con lo cual se reduce la huella de carbono asociada al transporte y se fortalece la economía local. Más ideas: en vez de comprar muchos regalos baratos, invierte en uno o dos productos de calidad, que serán apreciados y duraderos. La moda de consumo responsable también puede ofrecer opciones muy interesantes. Vigila los envoltorios, explora opciones reutilizables como las bolsas de tela que pueden ser muy coloridas y alegres.

Los días navideños son ideales para reflexionar sobre el verdadero significado de la navidad. Es una gran oportunidad para valorar lo que realmente importa: el tiempo con la familia, los amigos, la gratitud y la generosidad. En lugar de enfocarnos en las cosas materiales, celebremos momentos significativos y reforcemos los lazos que unen a las familias como el cariño y la solidaridad. El cambio es urgente para el futuro del planeta. Recuerda que la navidad no necesita ser extravagante. Pongamos un granito de arena para vivir su lado más auténtico.”

Carmen Sanchís, voluntaria de Cáritas Salamanca