En el Espacio verde de mayo, nuestra voluntaria Carmen Sanchís nos lleva a conocer el Comercio justo, sus beneficios y oportunidades para conseguir una sociedad que respete el medio ambiente y sus habitantes. Además, nos cuenta sobre la IV Feria Eco Social “Mil caminos”; un espacio que este año promovía conceptos como la soberanía alimentaria y resaltaba oficios propios de la región.
Qué sencillo es tomar un café, comer alguna barrita de chocolate, llevar un queso a casa… ¿Alguna vez has pensado que tu compra pudiera tener impacto en la vida de las personas que se dedican a cultivarlos y elaborarlos? El Comercio Justo nos brinda esa oportunidad. A través de este enfoque, millones de personas podrían mejorar sus condiciones de vida al recibir un pago más equitativo por lo que hacen, y nuestro consumo sería de gran apoyo en el caso de comunidades vulnerables en muchos países, incluyendo España.
El comercio justo es un movimiento internacional que lucha por una mayor justicia global en lo económico, social, humano y medioambiental. Propone un modelo comercial que protege los derechos humanos y el medio ambiente. Las organizaciones que pertenecen a este movimiento deben cumplir con un conjunto de principios que respetan los derechos humanos, laborales y sociales de las personas, llevan a cabo prácticas justas y sus actividades se realizan tomando en cuenta la protección del medioambiente.
Según la Organización Mundial del Comercio Justo, es un “sistema comercial basado en el diálogo, la transparencia y el respeto, que busca una mayor equidad en el comercio internacional prestando especial atención a criterios sociales y medioambientales. Contribuye al desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los derechos de productores/as y trabajadores/as desfavorecidos, especialmente en el Sur” (WFTO).
Anualmente, esta causa se visibiliza a nivel global para recordarnos que tenemos el poder de hacer algo en favor por las personas y la salud del planeta. El segundo sábado de cada mes de mayo se celebra el Día Mundial del Comercio Justo. Y en el marco de la fecha, el pasado 11 de mayo se realizó en la comunidad salmantina de Gomecello, la IV Feria Eco Social “Mil Caminos”, en la cual se dieron cita agricultores, productores, artesanos, familias, voluntarios e instituciones para pasar un día muy especial en las instalaciones de la Quesería Mil Caminos.
Desde Cáritas, queremos dar a conocer esta iniciativa emprendida por la fundación “Mil caminos”, que no solo tiene que ver con la compra de productos ecológicos para avivar la economía de la región, sino también de actividades dirigidas a poner en valor oficios en peligro de extinción a través de diversas charlas, una mesa redonda sobre Soberanía Alimentaria y Ecología, o talleres, como una forma de recuperar la interculturalidad intergeneracional de la España vaciada.
La feria ofreció, además, actividades para toda la familia: talleres de lombricultura, ordeño, esquilado, cetrería, artesanía en cerámica, artesanía en cuero, talleres de circo, percusión, magia, paseo en burro, pintacaras, elaboración de quesos, mesa popular y más, que hicieron del día una oportunidad especial para conocer un poco más acerca de nuestra tierra. Unas actividades en las que tuvo una gran implicación la Casa Escuela Santiago Uno; el centro de formación profesional que trabaja por el futuro de jóvenes con alto riesgo de exclusión.
Así que la próxima vez que tengas la ocasión de adquirir un producto proveniente del comercio justo, hazlo, ya ves que es una forma de hacer negocios sin perder de vista la justicia social. Recuerda que sí tenemos el poder de cambiar el mundo con nuestras pequeñas elecciones. Estamos poniendo nuestro granito de arena para que otras personas puedan vivir con dignidad y prosperar en la Casa Común.