La Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León acredita la renovación de este programa dedicado al apoyo y atención de jóvenes con problemas de adicciones y a sus familias.
El pasado 12 de abril, la Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León (encargada de acreditar los servicios de intervención con menores y jóvenes con consumo problemático de drogas) aprobó por resolución la acreditación del ‘Programa de Prevención Indicada Lazarillo’ de Cáritas Diocesana de Salamanca para el desarrollo de su labor los próximos tres años. Una reafirmación de la importante labor social que realiza este servicio de Cáritas, como parte de su Programa de Prevención y Atención a las Drogodependencias.
Un servicio adaptado a la provincia
Como ‘Programa de Prevención indicada’, Lazarillo funciona desde el tercer nivel de la prevención. María Jesús Justo, una las psicólogas responsables, lo aclara: “el primer nivel trabaja con toda la población. El segundo nivel es la prevención selectiva que interviene con grupos de riesgo. En el caso de la prevención indicada, se dirige a adolescentes de 12 a 21 años con consumos problemáticos de drogas, y a sus familias o personas responsables. Un consumo con consecuencias negativas en áreas fundamentales de su vida: personal, familiar, escolar o social”.
Lazarillo está formado por un equipo de tres psicólogas y dos educadoras sociales (centradas en el área formativo – laboral), sin olvidar el apoyo de un grupo de voluntarios, fundamentales en el día a día. Todos ellos respaldadas tanto por el Programa de drogodependencias, como por el servicio de asesoría jurídica de Cáritas, como por otros recursos de la entidad. Además, un convenio con la Cáritas de Ciudad Rodrigo (subvencionado por la Diputación de Salamanca) garantiza su intervención tanto en la capital salmantina como en el resto de la provincia, para una atención completa en el territorio.
Tratamiento y sensibilización
El programa ofrece a estos jóvenes una respuesta educativa y terapéutica a través de intervenciones ambulatorias, integrales e intensivas. Esto supone un trabajo en red, actuando en coordinación con otras entidades y mediadores relacionados con los casos. De acuerdo con otra de las psicólogas responsables, Paula Collantes, “cuando exploras el contexto de los jóvenes, te das cuenta de que las adicciones surgen de un fracaso escolar, de problemas de comunicación con la familia o de un vacío en su tiempo libre. La atención psicológica es muy importante”, insiste.
Solo el año pasado, el servicio atendió a 148 jóvenes y a 125 familias en Salamanca y otros 23 jóvenes y 20 familias en la zona de Ciudad Rodrigo. Un aumento preocupante con respecto a 2022, en el que atendieron a 117 jóvenes y 87 familias.
Atención a las nuevas realidades
El programa afronta las nuevas realidades de adicción en Salamanca, adaptando su trabajo para hacerles frente. Desde este 2024, Lazarillo atenderá a personas con uso problemático de pantallas; servicio que incluye adicciones a las TRIC (Tecnologías de la Relación, la Información y la Comunicación), videojuegos y juego con dinero presencial y online.
Además, el programa Lazarillo es el servicio de referencia de prevención para el Programa Ícaro – Alcohol. Tal como explica María Jesús, “su objetivo es prevenir y reducir los riesgos del consumo de alcohol y otras sustancias en población menor de 18 años que ya ha sido atendida por problemas derivados del consumo de bebidas alcohólicas. Evaluamos cada caso, y ofrecemos una intervención educativa precoz con la familia”, aclara la psicóloga.
Destacan también los talleres de sensibilización OH. COM. 11 talleres anuales en institutos y parroquias para la prevención del consumo de alcohol, en convenio con el Ayuntamiento y la Diputación de Salamanca. Este año, se han realizado ya 3 talleres con jóvenes entre 16 y 23 años. “Se trata de ofrecerles información, desmontar mitos y analizar las consecuencias tanto para su salud como para sus relaciones sociales”, explica Paula. “Todo ello a través de charlas, vídeos y actividades interactivas que sean atractivas para ellos”.
Lazarillo afronta el futuro con un compromiso firme por seguir previniendo las diferentes adicciones que viven los jóvenes; sensibilizando, atendiendo a aquellos que las padecen y a sus familias con trasparencia; contribuyendo, con el apoyo de todos, a una sociedad que pueda liberarse de estas ataduras.
El ‘Programa de Prevención Indicada Lazarillo’ es un proyecto financiado a través de la Gerencia de Servicios Sociales y el Comisionado Regional para la Droga de la Junta de Castilla y León, junto con fondos propios.