El centro de día Ranquines celebra su quinto aniversario

El recurso diocesano para personas con trastorno mental en situación de exclusión social cumple cinco años con una selección de actividades tanto internas como externas.

El Centro de día Ranquines celebra sus primeros 5 años de vida al servicio de las personas con trastorno mental en situación vulnerable. Un proyecto ya consolidado en Salamanca y en fase de expansión, que atendió a lo largo del año pasado a 16 familias y a 79 participantes, mejorando sus condiciones de vida y ofreciéndoles soporte terapéutico y apoyo orientado a su recuperación y a potenciar su autonomía personal. Un trabajo que se desarrolla a través de talleres grupales, atención psicológica individualizada, actividades comunitarias y acompañamiento personal y familiar.

Este quinto aniversario ha estado marcado por la participación y el protagonismo de las personas atendidas y el contacto social a través de una amplia selección de actividades entre los días 27 y 30 de septiembre.

El aniversario comenzó el pasado martes por la tarde con una fiesta en centro de día, que incluyó varios juegos y una merienda en la zona exterior. Le siguió el musical “5 años de Locura”, creado por la hermana teresiana Mercedes y protagonizado por los propios participantes, en el que cantaron y bailaron haciendo un repaso de estos cinco años, pasándoselo en grande. Además, la celebración tuvo su momento emotivo con el homenaje a la hermana Filo, de la Congregación de las Hijas de Jesús; una voluntaria que ha participado en el proyecto desde su origen en 2017.

El miércoles 28 la celebración se trasladó a la Plaza de la Iglesia de Santa Marta de Tormes, con una exposición abierta al público formada por varios paneles centrados en 3 áreas: un repaso de los 5 años del proyecto Ranquines, las diferentes actividades que se realizan en el centro, y los falsos estigmas asociados a las personas con trastorno mental, desmontados. Junto con la exposición, los participantes organizaron también una chocolatada, ofreciendo así a todos aquellos que quisieran acercarse una mirada más cercana tanto al centro como a sus integrantes.

Ya el jueves 29, tuvo lugar la jornada de puertas abiertas en el centro de día (situado en Avda. Padres Paúles, 14) de 10:00 a 13:30 y de 16:00 A 18:00, ofreciendo a los interesados la oportunidad de visitar las instalaciones y conocer de cerca la labor que se realiza. La oportunidad perfecta para recibir la visita de un grupo de jóvenes alumnos de las facultades de Educación Social y Pedagogía, junto con usuarios y técnicos de las asociaciones de Aspace, Asprodes y Afemc. Unas visitas llenas de calidez humana que ayudan a estrechar los lazos entre entidades de carácter social en Salamanca.

Junto a la jornada, el Círculo de Silencio de Cáritas celebrado a las 20:00 en Puerta Zamora (como es habitual cada último jueves de mes) estuvo dedicado a las personas con problemas de salud mental. Otra oportunidad perfecta para reclamar en público los derechos de estas personas y unas mejores y condiciones tanto en sus tratamientos con en su calidad de vida, y que, como no podía ser de otra forma, contó con la participación tanto de usuarios como de técnicos del centro Ranquines.

Por último, el viernes 30 comenzó la celebración a las 18:00 con una eucaristía en la capilla de los Misioneros paúles, a la que asistieron tanto participantes y voluntarios del centro como representantes de las  entidades de la iglesia que mantienen el proyecto:  Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús,  Hermanas de Nuestra Señora de la Consolación, Hijas de la Caridad, Parroquia El Milagro de San José, Religiosas de los Sagrados Corazones, las Hijas de Jesús (Jesuitinas) y Cáritas diocesana de Salamanca, coordinadora de este recurso diocesano.

A las 19:15 fue la presentación de la memoria en la conocida como “Sala del Trono” del Centro de Los Padres Paúles: un acto que contó con la intervención del coordinador del Centro de Día Ranquines José Manuel Lázaro; el ex coordinador Francisco Berbegal; David Mingo, alcalde del Ayuntamiento de Santa Marta; la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Salamanca, Ana Suarez y la y subdelegada del gobierno en Salamanca, Encarnación Pérez. Además de la asistencia de los concejales de Santa Marta Silvia González, Mª Cruz Gacho y Francisco Miguel García.

José Manuel Lázaro presentó los datos del último año, haciendo balance de estos “cinco años de ilusiones, de trabajo duro, de logros y desafíos, de sentir el apoyo y el cariño de muchas instituciones y personas de Salamanca”. En definitiva, de los muchos logros conseguidos, pero también de los retos concretos de cara a los próximos años (incluyendo la extensión a las zonas rurales con ayuda de una furgoneta que permita una mayor movilidad). En sus palabras, este último año ha estado “marcado por el inconformismo, el crecimiento y la Covid, que ha supuesto un aumento de casos que ha causado dificultades para cubrir todas las necesidades”. El proyecto Ranquines cuenta en la actualidad con 4 pisos compartidos que acogen a 16 personas, 2 grupos de ayuda mutua en la que participan 13 personas y un aumento del 20% en las atenciones.

David Mingo, alcalde del municipio, destacó los lazos que se han ido fortaleciendo con la congregación “hasta conseguir la excelente relación que exige a día de hoy”. También aprovechó para recordar la colaboración y coordinación para poner a disposición del Ayuntamiento “el auditorio del centro, una vivienda para los casos de desahucios, la acogida de estudiantes ucranianos y, por supuesto, la excelente labor que realizan con las personas con problemas de salud mental».  Por su parte, Francisco Berbegal aprovechó la ocasión para despedirse, tras cinco años al frente del proyecto.

Tras la presentación los asistentes disfrutaron de un vino español, y las actividades organizadas por el aniversario concluyeron a las 21:00 con un concierto del grupo cristiano Sicómoro, en un ambiente repleto de música y buen humor, que puso punto y final a una semana de intensa actividad.

Un año más, todos los que formamos parte de proyecto Ranquines agradecemos el apoyo recibido, los logros alcanzados gracias al compromiso de muchas personas, de las ocho entidades que lo forman, de las parroquias, congregaciones, cofradías, asociaciones y muchas personas particulares. También queremos agradecer la coordinación cada vez mejor con las administraciones públicas y el Sacyl; a nuestros muchos voluntarios… ¡Gracias por formar parte de este proyecto!