Círculo de silencio por las personas privadas de libertad

Cáritas inicia el curso con un círculo de silencio por los derechos de las personas privadas de libertad. 

Como cada último jueves de mes nos encontramos a las 20:00h en la Puerta Zamora, junto a la iglesia de San Marcos. Tras el acto tendrá lugar la lectura del manifiesto, que también podrá seguirse en directo en el canal de YouTube: www.youtube.com/caritasalamanca. 

Vivimos momentos de alarma sanitaria con una pandemia que azota a nivel global al ser humano. Un colectivo que está especialmente sufriendo estos momentos de distancia y aislamiento es precisamente quien ya estaba lejos y apartado de la sociedad. Son las personas presas, privadas de libertad. Para quienes vivimos fuera de las cárceles, nuestros mayores aliados en este tiempo de incertidumbre han sido la familia o los amigos; las nuevas tecnologías nos han permitido tener ese contacto virtual con los seres queridos. 

La situación en las cárceles se ha agravado en estos momentos de pandemia en el que los derechos adquiridos se han visto interrumpidos: se han cancelado las visitas, se han suspendido las actividades que sirven como medio de conexión con el exterior a través de agentes o voluntarios de distintas ONGs e instituciones. También se ha prescindido de la presencia terapéutica para ayudar a encajar esta nueva situación tarda en llegar más de lo normal y en muchas ocasiones ni llega. 

Los reclusos están pagando una pena por un error cometido, pero saber que existe un horizonte de esperanza da sentido a esos momentos de desaliento acentuados en momentos de pandemia. El objetivo de las cárceles es la reinserción social, entendida ésta como un proceso sistemático de acciones, orientado a favorecer la integración a la sociedad de una persona que ha sido condenada por infringir la ley penal. Para que esto se produzca es necesaria una comunidad acogedora. Una sociedad sin prejuicios que cree en las segundas oportunidades de las personas para rehacer sus vidas, sus familias y sus trabajos sin ser señalados. Y ahí entramos todos en juego.