El encuentro confederal ha tenido lugar entre junio y julio en El Escorial
Un año más, se ha celebrado la Escuela de Verano de Cáritas con la llegada de la estación estival; una propuesta de formación que se ofrece desde el Nivel Técnico Mixto en la que participan técnicos y voluntarios de todas las Cáritas españolas. Además, en los últimos años se está apostando por incluir a participantes de los recursos, una oportunidad que Cáritas Salamanca ha querido parovechar para contar con la colaboración de dos usuarios pertenencientes al Centro de Día de salud mental Ranquines.
El equipo de Cáritas Salamanca ha tenido un papel destacado en los cursos del segundo módulo (entre los días 6 y 9 de julio), centrados en el papel de los “facilitadores”, o personas que generan nuevos espacios de encuentro y animan a la participación. El objetivo ha sido reflexionar sobre los procesos participativos en Cáritas, y para ello se han analizado los elementos que los facilitan, las actitudes necesarias para sacarlos adelante y la forma de generar espacios facilitadores para participar dentro y fuera de la organización.
Una escuela de acción social
La escuela de verano forma parte de la acción formativa ofertada por Cáritas Española, concebida como un lugar de encuentro y de debate confederal (junto con la Escuela de Primavera y la Escuela de la Caridad). Organizado entre junio y julio, ofrece diversos módulos orientados al Modelo de Acción Social de Cáritas, que incluye temas como los derechos laborales, el cuidado de usuarios o la ecología. También se cuestionan los valores imperantes en la sociedad y las propias prioridades y valores, se da importancia a la promoción social frente al asistencialismo, el cuidado de necesidades relevantes (acogida, encuentro o la vinculación) y la importancia de mirar a otras realidades (migración, prostitución o la soledad).