Ha liberado una partida inicial de 50.000 € para distribuir productos de primera necesidad en las provincias más afectadas.
Cáritas Española ha puesto a disposición de Cáritas Filipinas una partida inicial de 50.000 euros para apoyar el plan de respuesta humanitaria a la grave emergencia causada por el tifón “Odette”, que arrasó parte del archipiélago el pasado 16 de diciembre.
El que ha sido el décimoquinto tifón del 2021 en Filipinas ha dejado tras de sí un devastador balance de daños humanos y materiales en 10 provincias del país. Según las últimas cifras oficiales, “Odette” ha provocado más de 400 fallecidos, unas 500.000 de personas desplazadas y 6,2 millones de afectados. Se estima, además, que más de 700.000 viviendas han resultado dañadas o destruidas por el tifón.
Respuesta de Cáritas Filipinas
En las primeras horas, Caritas Filipinas desplegó equipos de evaluación rápida en 10 provincias gravemente dañadas por el tifón y que ha afectado de forma muy intensa a las diócesis de Surigao, Maasin, Talibon, Tagbilaran, Cebú, Kabankalan, San Carlos, Dumaguete, Taytay y Puerto Princesa.
Como ha señalado el padre Antonio Labiao, secretario ejecutivo de Cáritas de Filipinas, “varias diócesis de las regiones de Visayas y Mindanao (en el sur de Filipinas) están gravemente afectadas por el tifón y necesitan urgentemente refugio, alimentos, agua y medicamentos”.
Según se indicaba en la alerta humanitaria lanzada por Cáritas Filipinas para responder a esta nueva emergencia, “muchas de las personas afectadas por esta catástrofe se encuentran en condiciones miserables y necesitan con urgencia alimentos, agua, ropa, refugio temporal y medicamentos. Están confinados en sus ciudades y pueblos, ya que la mayoría de las redes de carreteras están cortadas. Además, las líneas de comunicación son muy difíciles en este momento y la gente tiene dificultades para llegar a las comunidades afectadas”.
Los informes iniciales de los equipos de evaluación desplegados por Cáritas en las zonas afectadas son medicamentos, comida, agua potable, albergue temporal, equipos de higiene y saneamiento, productos de abrigo y lámparas solares.
Toda la red local de Cáritas se ha movilizado para distribuir ayuda de emergencia a los damnificados y está haciendo acopio de productos de primera necesidad en los centros de coordinación de las distintas Cáritas Diocesanas del archipiélago.
Caritas Filipinas se está coordinando con las organizaciones internacionales de ayuda, los organismos de respuesta a desastres del Gobierno filipino, las entidades de los gobiernos provinciales y los 10 centros diocesanos de acción social de las diócesis afectadas.
Cáritas Española está a la espera de conocer, en las próximas semanas, los términos del llamamiento de emergencia que Cáritas Filipinas lanzará a la red internacional de Cáritas para definir cuáles van ser los ámbitos de colaboración en los próximos años para afrontar las necesidades delos damnificados en las fases de post-emergencia y reconstrucción, que no serán pocas.
Los observadores comparan los efectos del tifón “Odette” con los provocados por el súper tifón “Haiyan”, que causó la muerte de a más de 7.300 personas en el año 2013. Filipinas, que figura entre las naciones más vulnerables del mundo a los efectos del cambio climático, sufre un promedio de 20 tormentas y tifones al año.