Conflictos armados, desastres climáticos y epidemias someten a las comunidades de estos países a una constante violación de sus derechos
Cáritas Española está presente en Sudán del Sur y República Democrática del Congo a través de varios programas de ayuda humanitaria, que han logrado acompañar a cerca de 85.000 personas en los dos últimos años. Gracias a la colaboración de entidades diocesanas, administraciones regionales y la Agencia de Cooperación Internacional, Cáritas Española ha conseguido invertir más de 3 millones de euros en estos territorios. Estos fondos han sido destinados sobre todo a la entrega de alimentos de emergencia, apoyo a las familias desplazadas y proyectos de promoción de la cohesión social y construcción de paz.
En el caso concreto de Sudán del Sur, Cáritas Española lleva apoyando a la Cáritas del país desde su creación en el 2011. Con una inversión de 1.026.000 euros, han financiado en los dos últimos años distintas iniciativas para sostener a los refugiados recientemente retornados con insumos agrícolas, y sistemas de agua y saneamiento. Además, apoya programas de construcción de paz, debido al importante repunte de los conflictos y acciones armadas entre comunidades, sobre todo motivados por cuestiones económicas, con una atención específica a la prevención de la violencia de género. Un total de 48.000 personas se han beneficiado de todas estas iniciativas en los últimos dos años.
La República Democrática del Congo sigue viviendo una de las crisis humanitarias más complejas del mundo. Los conflictos armados y las graves violaciones de los derechos humanos (DDHH), incluida la violencia sexual y las graves violaciones contra los niños, siguen empujando a millones de personas a buscar seguridad lejos de su hogar. En 2022, ha habido casi 6 millones de personas desplazadas en el interior del país, la cifra más alta del continente africano. Una gran mayoría de los desplazados son mujeres y niños. Durante su huida, se enfrentan a riesgos específicos de protección, como la violencia sexual o el reclutamiento forzoso en las mismas localidades donde se refugian.
Frente a esta situación, la respuesta de Cáritas Española se encuentra alineada con el Plan de Respuesta humanitaria internacional, centrado especialmente en personas desplazadas, infancia, víctimas de violencia de género, madres y personas con discapacidad. Con una inversión de más de 2 millones de euros, Cáritas Española apoya acciones humanitarias para cubrir las necesidades prioritarias, a través del reparto de artículos esenciales con el objetivo de reforzar la seguridad alimentaria de las comunidades más vulnerables.
También sostiene proyectos para acompañar tanto a familias desplazadas como a familias de acogida, reforzando la producción agrícola y las iniciativas de generación de ingresos desde un enfoque de género, la cohesión social y la construcción de paz. Además, fomenta la creación y fortalecimiento de Comités Locales de Organización Comunitaria (CLOC), que informan y sensibilizan a la población sobre las violaciones de DDHH frecuentes en su entorno y median en conflictos civiles entre personas y grupos. Con todas estas acciones, se ha conseguido ayudar a más de 36.800 personas.